La aceituna changlot real, descubierta y catalogada hace algo más de un siglo en la sierra valenciana de Enguera, lo tiene casi todo para convertirse en una de nuestras estrellas del olivar. Por un lado, produce aceites muy equilibrados de la serie frutado intenso, con suaves notas aromáticas de manzana, alcachofa y tomatera, seguidas de sabores amargos y picantes de intensidad media que le imprimen carácter y que hablan en favor de su estabilidad. Por otro, la especie presenta interesantes rasgos agronómicos, como su gran resistencia tanto a la helada como a la sequía y la temible tuberculosis del olivo, su productividad media alta y su alto contenido graso, por encima del 77 por ciento.
Sin embargo, en el lado opuesto presenta dos características que ahuyentan a los productores, sobre todo a los amantes del camino más fácil: una es que se trata de una variedad bastante vecera (alternancia de años de alta y escasa producción) y otra es su dificultad para desprenderse de la rama, lo que entorpece su mecanización.
EN LA COMUNIDAD VALENCIANA. La changlot real, cuyo nombre procede de su tendencia a presentar varios frutos por inflorescencia, como si se tratara de un fragmento de racimo de uva, se conoce también como chancló, changló, changlotera, racimal, racimilla, dulce o carlón, entre una larga serie de sinonimias y localismos. El fruto, que también es apto para el consumo de mesa, es de tamaño mediano con un peso medio-alto, de forma ovoidal y de color negro cuando alcanza la madurez.
En España se cultivan alrededor de 5.000 has de changlot real, la inmensa mayoría en la Comunidad Valenciana, sobre todo en las comarcas alicantinas del Alto y Medio Vinalopó, aunque también en las valencianas del Valle de Ayora y la Plana de Requena-Utiel, existiendo plantaciones de moderada extensión en otras zonas de la Península Ibérica, como Andalucía, Navarra o Madrid. Entre los productores de virgen extra que apuestan por la changlot real para sus aceites varietales o en sus coupages encontramos almazaras de prestigio contrastado como Artajo, Masía El Altet o Vega Carabaña.